Con las mejores intenciones se han cometido los peores daños a la humanidad… esta es una frase que se puede aplicar con relación a la crianza que algunos padres proveen a sus hijos, y es que la crianza es un área donde sí se ven los resultados que los padres y cuidadores han educado en los niños, y aunque pueden existir casos excepcionales en donde, aunque los padres y cuidadores intentaron formar auto regulación, virtudes, principios morales, y al final, los hijos demostraron lo contrario, -es un hecho-, que en la mayoría de los casos, los hijos fueron o son el reflejo de la crianza recibida, pero no solo por padres, sino también por escuela y sociedad.
A lo largo de mi experiencia profesional como counselor en los temas de crianza y desarrollo personal, he analizado y relacionado patrones de conducta en los niños y jóvenes, luego de tomar atenta nota, sobre lo que miles de padres me han contado, -con respecto-, a la manera como han criado a sus hijos, puedo concluir con autoridad, que existen infinidad de maneras de equivocarse al criar a los hijos, pero, realmente existen pocas o contadas maneras de acertar al respecto.
Las siguientes son algunas decisiones y situaciones erradas que los padres pueden tomar o hacer, y que describo detalladamente en mi libro “Los problemas de los padres de hoy”, por ejemplo:
- Cuando los padres le otorgan poder absoluto a los niños pequeños y el niño termina mandando en casa.
- Cuando los padres permiten que sus hijos los irrespeten.
- Cuando los padres no manejan adecuadamente las pataletas y berrinches de sus niños
- Cuando los padres no fijan límites y no representan autoridad para sus hijos.
- Cuando en casa todo termina girando en torno a los niños únicamente.
- Cuando los padres no tienen control de los medios de comunicación, las redes sociales y/o los equipos electrónicos que consumen sus hijos.
- Cuando los padres son permisivos y/o sobreprotectores.
- Cuando los padres no son prudentes frente a sus hijos en distintos contextos y temas.
- Cuando los padres son ambivalentes o inclusive se contradicen entre sí.
- Cuando los padres en lugar de corregir, buscan es castigar y hasta vengarse.
- Cuando los padres no quieren ser padres y no buscan serlo, aunque lo son.
- Cuando los padres son violentos, autoritarios y desconocen los derechos fundamentales de los niños como seres humanos y como personas.
- Cuando los padres en lugar de incentivar, buscan premiar desmedidamente.
- Cuando los padres no saben hablar y comunicar frente a los hijos
- Cuando los padres son abandonicos y los niños se sienten solos o inclusive crecen solitos.
- Cuando los padres no le proveen al niño de un hogar o unos ambientes estables, en el caso de los padres separados.
- Cuando los padres no educan valores y virtudes sabiamente.
- Cuando los padres no son un ejemplo a seguir.
En fin, estos son solo algunos casos que detallo en mi libro “Los problemas de los padres de hoy” y en donde desgloso cada uno de ellos, orientando la manera como se deben abordar asertivamente en la cotidianidad.
Recuerda que es muy importante tomar consciencia de la responsabilidad de ser papá, de ser mamá, existe un orden natural para el desarrollo y el crecimiento de los niños y jóvenes, somos los adultos, los padres y las madres quienes formamos a las nuevas generaciones, de acuerdo a lo que queremos que ellos sean.
Así que la próxima vez que observes un adolescente, un joven o una jovencita comportarse de forma controversial, o generando polémica, o inclusive viviendo de forma cuestionante, más que escandalizarte, criticar o condenar esta “desenfrenada juventud” cómo la llaman, mejor reflexiona sobre el tipo de padres que éstos jóvenes tuvieron, investiga sobre el tipo de hogar que sus padres les ofrecieron, Analiza el dominio de los medios y redes de comunicación que han influenciado y controlado a los muchachos, y detalla un poco más, investigando sobre la educación escolar que tuvieron… más allá de eso, pregúntate ¿cuál fue el rol de padre o madre que tuvieron cuando crecían?, ¿cuál sería el sistema de valores educado?, ¿qué escala de principios morales y éticos están imitando?, ¿qué vacíos pueden estar tratando de llenar al comportarse de ésta manera? ¿A quién están copiando o están reproduciendo? ¿Contra quién o contra qué se están revelando?
Finalmente, no se trata de costumbres, tradiciones o leyes, la crianza de los hijos debe desafiarnos a nosotros los padres, a ser las mejores y más íntegras personas que ellos puedan tener, debemos ser los mejores modelos a imitar en la forma de hablar, de pensar, razonar, comportarnos y relacionarnos, y también tener las mentes más abiertas para aprovechar los recursos, la tecnología, los avances científicos, pero sin olvidar que el amor y las virtudes humanas, son prerrequisito fundamental e irremplazable, para darle sentido a la vida de los niños y jóvenes, para que vivan con percepción adecuada de felicidad, con propósito de vida y con sanas relaciones interpersonales.
No desaproveches el día a día con tus hijos, edúcales para que se sientan seguros, no descuides los detalles, maneja sabiamente esos momentos graciosos de irreverencia o rebeldía de los hijos hoy, para que mañana esos momentos, no se conviertan en escenas de vergüenza y lamento. Establece límites sanos, y conviértete en la mayor influencia positiva para los niños a tu alrededor. No podemos exigirles algo que no les hemos dado, mostrado y testificado.
Que nunca se nos olvide que el mayor éxito se encuentra dentro del hogar, que la mayor satisfacción no es el poder y la fama, sino el buen legado y la descendencia, que nunca se nos olvide que de forma trascendente o no, se nos va a demandar lo que hicimos de nuestros hijos y con nuestros hijos. Que aquellas famosas frases que dicen “de tal palo tal astilla” o “por sus frutos los conocerán”, las tengamos tan presentes en nuestras pautas de crianza, que los resultados sean evidentes, a mediano y largo plazo, y nuestros hijos puedan ser admirados y dignos de imitar por el mundo y la sociedad. Anímate, al educar asertivamente a tus hijos hoy, te convertirás en la figura más admirable para ellos, por encima de súper héroes prefabricados de cartón y fantasía.
Así que éste mensaje es para ti que me estás escuchando, te aliento a reflexionar sobre la manera como estás criando, analízate, y toma decisiones firmes para cambiar lo que tú sabes que no estás haciendo bien, estudia sobre los pilares de la buena crianza, te recomiendo mi libro “Padres con carácter” para ubicarte en tu rol con mayor claridad. A final de cuentas lo que está en juego, es la felicidad de tus hijos y el futuro de la sociedad, vale la pena el esfuerzo y el compromiso.
Contáctame si requieres orientación, estaré muy gustosa de ayudarte a ser mejor padre o madre.