Para empezar a planear lo que quieres hacer, lo que quieres lograr, lo que quieres conquistar, obviamente es necesario tener claro hacia dónde te diriges. Sin embargo, para muchas personas esto no es del todo claro. Los objetivos trazados pueden verse afectados dramáticamente si miramos el caos ambiental y social por el que atravesamos, si escuchamos los vaticinios pesimistas del futuro, o, si revisamos las estadísticas y tendencias.
En este tiempo todos queremos entrar en nuevas temporadas más alentadoras que las vividas recientemente, ten en cuenta estos 6 aspectos que te pueden orientar en la transición que quieres:
- No olvides tu pasado: si bien no se trata de vivir en el pasado, si es necesario revisar lo ocurrido, lo que funcionó, lo que activó crisis, lo que no funcionó, lo que no debe repetirse, lo que debe perpetuarse. Las situaciones vividas deben ser maravillosos aprendizajes para establecer pautas de vida funcionales, asertivas y plenas. Pregúntate: ¿Quieres seguir viviendo igual? ¿Qué quieres mantener de tu pasado? ¿Qué puedes aprender de lo vivido? ¿Qué determinación tomas para repetir o no repetir ese pasado?. ¿CUAL ES TU PLAN?.
- Reflexiona: ¿De dónde vienes?: Tu origen determina muchos aspectos de tu vida, tu carácter, tu personalidad, tu temperamento, tus costumbres, tu cultura, tu manera de pensar, tus conductas, tu comportamiento y tu forma de ser. Es gratamente valioso y reconfortante hablar con personas que tienen claro su origen, y responden claramente a la pregunta ¿De dónde vienen?, estas son personas que han realizado o están realizando un proceso de desarrollo personal, superando traumas, mejorando patrones de crianza, nivelando su autoestima, “domando” su carácter, aceptando su personalidad, trabajando en su carácter, haciendo las paces con sus padres y familiares, potenciando sus dones y talentos, en fin. Para tener mayor claridad de hacia dónde te diriges, es importante que sepas de dónde vienes, esto te ayudará a pararte objetivamente en tus metas y podrás establecer objetivos cumplibles a corto y mediano plazo.
- Identifica objetivamente tu identidad: Responde de forma concreta esta pregunta ¿Quién eres? Al tener claro quién eres como persona, como ser humano, y en los distintos roles en que te desempeñes, podrás dirigirte a tus metas aferrándote a ellas con ahínco y fiereza. La identidad no solo establece el sello de cada persona, es su marca personal para expresar al mundo que se es único, irrepetible y singular. El quien eres determinará lo que haces con tu vida. Es por eso que debes preguntarte: ¿Tienes clara tu identidad? ¿En qué te diferencias de los demás? ¿Cuáles son tus dones, tus talentos, tus cualidades, tus capacidades?, ¿Cuáles son tus debilidades?. }
- Piensa en lo que estás pensando: Muchas personas no pueden avanzar hacia sus metas, porque tienen su mente llena de pensamientos de temor, miedo, terror, pánico, enojo, ira, amargura, quejas, incredulidad, desagradecimiento, y otros cuantos pensamientos tóxicos que impiden percibir, observar y contemplar nuevas oportunidades, nuevas estrategias, nuevas ideas. Para avanzar hacia tus metas debes tener grandes dosis de optimismo, fe, ánimo, valentía, perseverancia, constancia, diligencia y amor. ¿Qué hay en tu mente?
- Apóyate y apoya: No solo se disfrutan las metas alcanzadas, muchas personas de hecho disfrutan más el camino a la meta que la misma meta. En el camino a las metas las personas que soportan, ayudan, colaboran, apoyan y animan, resultan tan cruciales, que pueden representar el éxito o el fracaso de un plan. ¿Cuál es tu equipo?, ¿En quién te apoyas? Por otra parte, es importante recordar que cada uno de nosotros tenemos poder para afectar a los demás, asegurémonos que nuestra influencia ayude a otros a cumplir sus metas, ser facilitadores de sueños para otros, es quizás una de las labores más gratificantes y sublimes de todo ser humano.
- Enfócate estratégicamente: Averigua, lee, instrúyete, conoce, contacta, utiliza lo que tienes a la mano, no te compares, reconoce cuál es tu fuerte. La estrategia que utilices para llegar a la meta incluye tiempo y los diferentes recursos que puedas necesitas (recursos humanos, físicos, materiales, económicos, comunicativos, de marketing, etc.) Muchos aún nos encontramos en este punto porque quizás es uno de los que más planeación requiere y más tiempo demanda a diario. ¿Cuál es tu plan?
Entramos a una nueva temporada, hay un mundo maravilloso esperando por ti, si dentro de tu corazón hay amor, fe y esperanza, si dentro de tu mente hay ánimo, perseverancia, laboriosidad, si dentro de tus hábitos hay disciplina, constancia y orden, si dentro de tu ambiente hay apoyo, organización y respeto, te espera un futuro glorioso porque estoy segura: Tu estas marcado o marcada para grandes obras. CREELO!