LA SOLEDAD PUEDE LLEGAR A MATAR…

by | Dic 7, 2020 | Uncategorized | 0 comments

La soledad puede llegar a matar… hemos escuchado casos donde bebés bajo custodia que carecen de contacto humano no siempre prosperan y algunos llegan a morir, jóvenes  que tienen una red social limitada – aislados en un rincón, y que han llegado a concebir el suicidio como salida ante la sensación de pérdida,  adultos  que literalmente viven  y se sienten solos y que han desarrollado  cardiopatías, inflamación en su cuerpo y muchas enfermedades incluido el cáncer , personas mayores y ancianos cuya muerte antecede a un largo período de soledad impuesta.  Es verdad.. Puede ser desastroso lo que puede ocasionar la soledad o la percepción de sentirse y estar solo.

La soledad según algunos  diccionarios de psicología, es un sentimiento prolongado (que la mayoría percibe)  desagradable e involuntario de no estar relacionado significativamente o de manera próxima con alguien.  En otras palabras, son esos momentos donde hemos pasado  espacios y estados donde no ha habido otros que actúen como intermediarios con nosotros mismos.

Todo ser humano ha experimentado la soledad y ésta ha sido útil para  madurar nuestros procesos de autonomía e independencia. Sin embargo, la soledad que abordamos en este artículo , se refiere a aquella que provoca sentimientos de desánimo, agobio, tristeza, desconsuelo, depresión, e  inclusive aquella soledad que llega a alterar la identidad y el proyecto de vida de las personas.

Hay dos tipos de soledad que pueden llegar a ser realmente desagradables:  Soledad por aislamiento emocional que deriva de la ausencia de una relación intima con una figura de apego y la soledad por aislamiento social que ocurre por falta de lazos con un grupo, red u organización social.  Ambas llegan a ameritar la consulta a un especialista, en el primer caso para superar el duelo, generar estrategias de afrontamiento y superar en sí la “pérdida” o la “ausencia”. En el segundo caso para implementar habilidades sociales que permitan el relacionamiento y los contactos sociales.

Es importante tener en cuenta que la percepción prolongada de soledad puede llegar a tener serias consecuencias para el ser humano, de hecho, la soledad como  rasgo ha sido asociada a ciertos tipos de cáncer, algunos estudios indican que es letal para la salud mental y para la esperanza de vida.  Otros indican que las personas solas viven en promedio 15 años menos que los que tienen redes sociales solidas.   La soledad puede llegar a alterar tanto a la persona que puede transformar su genética, al respecto el área de la genómica social que es la que establece  como la interacción social afecta a nivel genético, ha concluido que la soledad logra alterar el sistema inmunológico afectando algunos genes específicos.

Según otros estudios  el aislamiento social y la soledad aumentan significativamente el riesgo de mortalidad prematura, y esto es porque el estar conectado socialmente con los demás se considera una necesidad humana fundamental, sin embargo, hay que tener en cuenta que la soledad no es una condición absoluta. Más bien, se define por la necesidad de un individuo, ya que cada persona tiene diferentes requisitos sociales, por ejemplo:  los introvertidos necesitan menos amigos e interacciones sociales a lo largo del día para sentirse “no solos”, mientras que los extrovertidos pueden requerir mucha más interacción.

Inherente al temperamento y a los rasgos de personalidad, los seres humanos necesitamos socializar, algunos estudios llegan a asegurar que por encima del ejercicio y de la dieta alimenticia,  la salud mental se deriva de una red social activa y rica.  De ahí la importancia de integrarnos socialmente, de tener interacciones sociales con familiares, amigos, vecinos, personas con las que nos podemos topar o comunicar a diario y en general con integrantes de nuestra comunidad.  Esta importancia se eleva con el paso del tiempo,  ya que en la vejez, esta integración social constituye un factor protector de la salud y un rasgo de longevidad.

Definitivamente, se nos demanda integrarnos socialmente, relacionarnos, y para aquellos que tienen el privilegio de educar y criar por estos tiempos,  desarrollar las habilidades sociales en los niños y jóvenes, aún recordando la prudencia de enseñar la naturalidad de los momentos en sociedad y de los momentos en intimidad.   Por ejemplo, el confinamiento solitario para los niños como un castigo (comúnmente llamado time-off) debe ser aplicado desde cierta edad, en condiciones  adecuadas y con las medidas que aseguren que los niños no serán afectados en su autoestima e identidad.

En fin.. evite caer en lo que algunos han llamado la epidemia de la soledad, aquí algunas recomendaciones:

  1. Aproveche los momentos donde se encuentre solo para meditar en su vida, realizar un oficio, practicar hobbies, ejercitarse, leer, descansar, crear, inventar, programar y trabajar.
  2. Evite hablar acerca de sus sentimientos de soledad, de manera que los enaltezca y los posicione dentro de su discurso conversacional interno y externo.
  3. No es necesario que confiese que se siente solo.
  4. Un impedimento para que las personas socialicen se relaciona con procesos de perdón no resueltos hacia personas de su pasado o con las que está rodeado. Si este es el caso, la llave del perdón puede hacer que perciba a las personas que le rodean de una manera proactiva y amorosa.
  5. En los momentos de soledad, recuerde que el AGRADECIMIENTO es mas que una herramienta, es la llave que abre el campo de la esperanza, el optimismo y el ánimo.
  6. Si su soledad es por algún temor específico (a que lo hieran, a las personas, al dolor, etc.) es hora de afrontar los miedos y avanzar en su vida. Consulte a un especialista.
  7. Supere la tentación de recordar las cosas negativas del pasado durante los momentos en que se sienta solo(a), de lo contrario,  puede aumentar su percepción de pérdida y sus sentimientos lo abrumarán. Piense en lo mejor del pasado y de su futuro.
  8. Si el sentimiento de soledad es demasiado abrumador y considera que necesita hablar con alguien, -hágalo-. Llame a una persona de confianza que le pueda animar, distraer y motivar.
  9. Diferencie los estados de soledad, con los estados de cansancio y estrés, cuando se mezclan, el resultado es bastante perjudicial, afectando la capacidad de decisión y la resolución de problemas. Recuerde que preocuparse no es funcional.
  10. Elabore un plan de vida, organice su tiempo, programe sus metas, sueños y tenga definidas sus motivaciones. Algunas veces las personas que experimentan soledad no tienen nada claro a este respecto.
  11. No rechace las llamadas de las personas que se quieren conectar con usted. Aunque hay que ser selectivos siempre, vaya construyendo poco a poco, una red social que tenga intereses similares a los suyos y un marco axiológico que puedan compartir. Recuerde el tener amigos sanos crea conexiones sanas y placenteras.
  12. Hable con optimismo acerca de su vida social, de sus habilidades sociales, de sus expectativas y de sus realidades. Las personas terminan recibiendo y viviendo lo que hablan cotidianamente.

Recuerde siempre la importancia de estar conectado,  realizado y comprometido con el mundo en el que vive. Usted es un ser único, maravilloso, talentoso, con grandes capacidades y habilidades. Usted merece amar y ser amado. Disfrute los momentos de soledad y sea productivo en ellos, pero también, intégrese socialmente desarrollando interacciones sanas, productivas, pacificas… finalmente, su legado trascenderá a través de su red social establecida. ¡Atrévase a amar a los que le rodean y a recibir el amor que le quieren dar!.

Ha sentido que su soledad es más que ordinaria?  Se siente limitado por ella?,  Se siente insatisfecho, triste, deprimido?… No dude en consultarme.

Ana Cruz

Psicóloga.